Los colectivos no dejan de asombrarme. No importa el tiempo que pase. Los choferes mantienen el orgullo de ser los reyes del lugar, decorándolo como si fuera su propia casa.
Lo que quiero saber es, concretamente, dos cosas:
La una: cuándo empezó la costumbre de tunear colectivos.
La dos: el por qué de los espejos labrados, números, nombres de hijos o amores; el matelasé detrás de asientos con resorte, el peluche alrededor de espejos, los dados, los flecos y etcéteras.
(Tiempo atrás también hubiera estado el fileteado por fuera y por dentro, la palanca de cambios con la bola de acrílico, y la boletera era manual, se acuerdan?)
Mi mayor asombro fue al ver en la línea 68, que a pesar de contar con nuevas unidades, mantuvo en el interior la estética de los viejos colectivos Mercedes, incluso con un mini-turbo para el calorcito de la ciudad en este fresco febrero.
Esta decoración da glamour? Da sensación de pertenencia? Da status? Es sólo del gremio de los colectiveros o los camioneros optan por la misma estética? La decide el conductor o la línea?
Son todas las preguntas que siempre me hice y nunca tuvieron respuesta.
Necesito un amigo colectivero.
Jajaja... me mató la frase final. Habrá que buscar un amigo colectivero entonces. O alguno que trabajo en alguna empresa de colectivos.
ResponderEliminarHabía un blog que se llamaba opera colectivera, pero ya no escribe el muchacho
Besotes!
D
Hola Des! gracias por el comentario, habrá que ponerse en campaña. No creo sea tarea difícil solo es cuestión de proponerselo, jajaja. Quizás sólo se necesite un revoleo de pestañas y cara de pichicho mojado preguntando "disculpe, ¿va para Plaza de Mayo?".
ResponderEliminarQué lástima que el muchacho ya no escriba... pintaba bueno. Besos amiga!
Aca (Cordoba) no tenemos la suerte (estetica, para mi gusto) de tener los colectivos Mercedes 1114. Aca todos de los que tenemos son todos de los que se hacen en brasil. Los 1114 me encantan.
ResponderEliminarUna vez subi a un bondi que tenia una calco bastante grande de pikachu. weird.
y otra vez me subi a otro en el que los choferes tenian gustos muy diferentes, entonces cada uno decoraba la mitad del bondi, era bastante gracioso ese.
Y otra experiencia, que nada tiene que ver con el post, pero tengo que despacharme.
Me subi a un bondi que tenia algun defecto, entonces no dejaba subir a nadie mas, entonces la gente solo bajaba y me fui quedando solo.
Cuando fui el ultimo pasajero, el chofer me pregunto a donde iba. A la facultad respondi, que queda en tal lado.
El tipo me llevo hasta la puerta de la facu. Me senti como Elvis.
Yo creo que la estética del bondi con chirimbolos (sí me acuerdo de la bola de acrílico de la palanca!!) tiene que ver con la pertenencia. De igual manera que algunos modelos de auto van por la calle reventando parlantes con cierto tipo de música. Inclusive son de determinados colores.
ResponderEliminarNo hace mucho me sorprendió subir a un bondi y sentir, de repente, que la radio que sonaba en mis orejas (celular mediante) empezó a retumbar en una especie de superstereo. Cuando me saqué un auricular me di cuenta que el chofer, jovencito él, escuchaba la Metro... weird.
Sanguche: qué buena anécdota. Amo los colectiveros con buena onda. Realmente son personas especiales, porque qué laburo de merde, no? Uno de los más estresantes, sin dudas, y con tan poca satisfacción (salvo que alguna calesitera les haga ojitos)
Sanguche, muchas gracias por tu comentario. Me dio miedo el calco de picachu. Igualmente aquí ya no quedan de esos colectivos mercedes, la foto era pura ilustración. Buen gesto el del colectivero, servicio puerta-puerta! Me hubiera gustado ver el que estaba decorado por dos choferes!
ResponderEliminarJazmin, definitivamente la estética del colectivo marca pertenencia e identidad, y quien sabe si algo más... Será el equivalente a nosotros diseñadores que llenamos de chirimbolos las computadores? Y más o menos pautados: los muñequitos del jack, el cactus, stickers, papelitos y afines... Beso!
Y ojo con el kiosquito de revistas tuneado interiormente porque también se las trae, ¿eh?
ResponderEliminarGracias por tu comentario! Tengo que averiguar sobre el tuneo del interior del kiosko, ahí si que puedo acceder a fuentes confiables. Mi vista llega tan sólo hasta la radio portátil... Lo que si vi, es un kiosko paquetísimo en Belgrano que tiene un cartel de leds luminoso, con pintura verde impecable y detalles simil hierro dorado argentinísimo... parecía una nave espacial más q un kiosko. Saludos!
ResponderEliminarEn Belgrano shomosh así, bolá.
ResponderEliminarLeds, rush hours, meetings...
No sé, pensalo.
PD: Por cierto, ayer me compré el perrito que mueve la cabeza taca, taca, asiente, típico de colectivo o luneta grasa. Es LO MÁS y se consigue en Plaza Italia por apenas 2 pesito es lo que vale.