miércoles, 23 de septiembre de 2009

Recomendados II

Mientras trabajo en el regalo de cumple, una vuelta gratis...

Si bien no soy especialista en el área, me gustaría recomendar algunos libros con los que disfruto o he disfrutado.

Un gran escritor uruguayo, no del todo reconocido aún, Juan Carlos Onetti. Su colección de Cuentos Completos de Alfaguara, y "La vida breve" se ganan todas las palmas. No puedo más que recomendar que lean este genial escritor y saquen sus propias conclusiones. Su habilidad narrativa (el poder dar cuenta del pasado y presente, las emociones o pensamientos, junto con las acciones... en un mismo párrafo!), y a su vez, una poética muy personal. Para mí, un antes y un después en la literatura. Simplemente fantástico.


Mi libro favorito de los últimos años, "La Historia del amor", de Nicole Krauss. No se dejen engañar por el título, no hace justicia al contenido. Una obra maestra de una escritora norteamericana muy joven, que estuvo el año pasado dando una exquisita charla en el Filba (¡aquí la entrevista que le realizó Juana Libedinsky!).
Personajes entrañables que se entrecruzan de maneras inesperadas, una muy cuidada edición, resultan en un objeto editorial poco convencional, casi lúdico. Absolutamente recomendable. Estoy a la espera de su primer novela, "Man walks into a room", que desgraciadamente no ha sido publicada en español y se consigue únicamente en EEUU.


Otra escritora mu joven, esta vez argentina, Samanta Schweblin, de quien sólo tuve oportunidad hasta ahora de leer un volumen de cuentos, "Pájaros en la boca", cuyas historias, atrapantes y escalofriantes, sumado a su modo de narrar, la convierten en una escritora definitivamente única.



Estoy leyendo "La conjura de los necios", de John Kennedy Toole, terriblemente delirante y muy divertido. A pesar de sus márgenes inexistentes, interpalabrado (¿puedo decir tracking, aunque sea léxico de designer?) e interlineado muy difícil, y una traducción extraña, se deja leer. Me gustaría leerla en el inglés original, A Confederacy of Dunces. De mientras, ésta es la versión que encontré. Los personajes si bien son disparatados, no dejan de ser fieles retratos de la sociedad actual. Veremos si supera a "La Biblia de Neón"...

viernes, 11 de septiembre de 2009

Mi cumple feliz

Siendo hoy el día de mi cumpleaños, a modo de festejo, les quiero regalar un cuento... así que sale una historia a pedido! Si, si, leyeron bien, a pedido.

Será una historia de cumpleaños feliz? Infeliz? Una de terror? Una comedia? Qué intriga...

Los que quieran participar, sólo tienen que escribir un tema o una frase inspiracional, aquí, en los comentarios.

Vale todo. ¡Los espero!

martes, 1 de septiembre de 2009

El encuentro (2º parte)

Mi amigo parecía seguir interesado en seguir charlando. Así que tomé coraje para continuar la conversación.
– ¿Y ustedes a dónde van?
– Nosotros estamos yendo a cenar.
– ¿A dónde? – noté cierto desagrado en el rostro de la chica
– A todos contentos.
– Ah, es un buen lugar. – mi amigo sonreía, la chica parecía intranquila (¿habrá adelgazado?), y miraba hacia atrás cada vez con más frecuencia. Me pregunté si se habría olvidado algo, o si tendría que estar en otro lugar en ese mismo momento. Ante tamaña muestra de negación a la charla, me forcé a hacer un comentario amable...
Nos tenemos que encontrar otro día, a tomar algo los cuatro, más tranquilos, ¿no?
– Sí, si, seguro. – respondió mi amigo, asintiendo sin dejar de sonreir.
– Además así conozco a la gorda.
– Bueno, que pasen bien. Qué lindo verlos.
Fue ahí que
hice el último intento de levantar un momento inlevantable...
– Che, y por favor, acordate de subir fotos de ustedes más recientes. Ni ví las de su casamiento, ponete las pilas, que las que ví por última vez eran de hace seis años. – ella ya ni siquiera miró y casi podría decir que empujaba a mi amigo.

Después de un rato de caminar, quise hacer un comentario
a mi novio al respecto – Me pone tan contenta verlo bien, vos sabés que estaba de mal la última vez que charlamos... Más que nada por la gordita, imaginate, tan chiquita... – El me miraba como si fuera un ET, no sé por qué – Camila se llama, una gordita divina, pelirroja. Me pregunto a quién habrá salido...
A ella no se le parece en nada.

El encuentro


– ¡Hola! – dijo una voz, en plena calle, hice de cuenta que no escuchaba nada y seguí caminando.
– Hola, ¿no me reconocés? – dijo la voz, insistente. La cara se me apareció borrosa en medio del barrio chino. Era una de esas noches donde el tiempo parece quieto. El calor aún no había dejado a la ciudad. La calle estaba rodeada de lámparas, guirnaldas, y gente caminando. Una mezcla de aromas invadía el aire, que lo repartía impune. El chico de la voz podría ser... cualquiera. Me acerqué unos pasos para ver si mis ojos lograban reconocerlo.
Si, en efecto, era un viejo compañero de trabajo. Estaba con su mujer (la recordaba más alta), de modo que la saludé, y les presenté mi novio a ambos. Realmente me puse muy contenta de encontrarlo.
– ¿Cómo estás, tanto tiempo? ¿Qué es de tu vida?
– Todo bien, acá, paseando un poco. – recordé que tenía una hija muy linda.
– ¿Cómo está la gorda? Debe estar enorme. ¿Cuántos años tiene ya? – pensé que cuatro.
– Seis. Si, está enorme.
– Qué bueno, me alegro mucho. Tenés que subir fotos de tu hija, ¡la tenés oculta!
– Si, es cierto, hace mil que no subo fotos... prometo.
– Che, me pone muy contenta verlos juntos. Se los ve muy bien, me alegro que hayan campeado la tormenta. – mi amigo sonreía, parecía contento. Me pareció que ella miraba hacia el piso, y que la sonrisa se le desdibujaba (¿no tenía el pelo largo?). Sabía que habían pasado tiempos difíciles. Me parecía muy tierno verlos tan bien, sobre todo por la petisa. – ¿Van a comer a algún lado? – mi novio me miraba raro, no sé por qué.
– No, no, venimos del cine. Y ya nos estamos volviendo. – ella parecía inquieta. Daba vueltas con el pie sobre el piso, giraba un poco el cuerpo, como si ya quisiera irse. Me pareció que era una lástima, hasta ahora, nunca la había conocido en persona...


(continuará)